El tejido óseo está compuesto básicamente por un mineral llamado calcio, que le da dureza y resistencia a los huesos si se encuentra en un porcentaje apropiado. Sin embargo, por diversas causas ese porcentaje o densidad ósea puede variar y disminuir, volviendo a los huesos mucho más frágiles y menos resistentes a las fracturas.
La Densitometría Ósea permite medir los huesos, y obtener información importante -de forma indolora- para diagnosticar la Osteoporosis. El examen se hace por medio de rayos X de baja energía y poseen una intensidad similar a la de los rayos X usados para una radiografía de tórax
El procedimiento es sencillo y no requiere de una especial preparación por parte de la paciente. Ésta se acuesta en una camilla y se le coloca encima un escáner que recibe la radiación pasando a través de las partes del cuerpo que se desean estudiar. Los rayos emitidos por el escáner determinarán la densidad ósea que presentan los huesos en esas zonas.
De esta manera se obtiene en forma computarizada datos acerca de la densidad del hueso, para poder prevenir fracturas producidas por contactos leves.